La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) aprobó Journavx un
analgésico no opioide para tratar el dolor agudo de moderado a severo en adultos.
Ensayos clínicos mostraron que Journavx (suzetrigina), en un régimen de comprimidos orales de 50 miligramos, reduce significativamente el dolor al actuar sobre una vía especial en el sistema nervioso periférico, antes de que las señales de dolor lleguen al cerebro.
Journavx es el primer fármaco aprobado de esta nueva clase de medicamentos para el manejo del dolor. Y el primero en 25 años para tratar el dolor agudo. Expertos dicen que podría significar un giro positivo en la lucha contra la epidemia de opioides, generada por el abuso de estos medicamentos adictivos en el tratamiento del dolor.
El dolor es un problema médico común y aliviarlo es un objetivo terapéutico importante. El dolor agudo se define como uno de corta duración que suele ser una respuesta a algún tipo de lesión en los tejidos, como un traumatismo o una cirugía. El dolor agudo suele tratarse con analgésicos que pueden contener o no opioides.
“Una nueva clase terapéutica de analgésicos no opioides para el dolor agudo ofrece una oportunidad de mitigar ciertos riesgos asociados con el uso de un opioide para el dolor y brinda a los pacientes otra opción de tratamiento”, dijo Jacqueline Corrigan‑Curay, directora interina del Centro de Evaluación e Investigación de Medicamentos de la FDA, en un comunicado de prensa.
El dolor es una señal del sistema nervioso de que algo no anda bien. Es una sensación desagradable, como un pinchazo, hormigueo, picadura, ardor o molestia. Puede ser agudo o sordo. Intermitente o constante. Se puede sentir dolor en algún lugar del cuerpo, como la
espalda, el
abdomen, el
pecho o la
pelvis. O puede tratarse de un dolor generalizado, díficil de localizar.
El dolor puede ayudar a diagnosticar un problema. Sin dolor, una persona podría lastimarse gravemente sin saberlo o no darse cuenta de que tiene un problema médico que requiere tratamiento.
Hay dos tipos de dolor: agudo y
crónico. En general, el dolor agudo aparece de repente, producto de una enfermedad, lesión o inflamación. A menudo puede ser diagnosticado y tratado. Generalmente desaparece, aunque a veces puede convertirse en dolor crónico. El dolor crónico dura mucho tiempo y puede causar problemas graves.
El dolor en la mayoría de sus formas puede llegar a ser discapacitante, interfiriendo con las actividades diarias, laborales, familiares y sociales, causando un malestar que puede derivar en una afección de salud mental. Por eso no hay que tolerarlo: hay que visitar al médico y tener un plan de tratamiento. Esperar puede significar que el cuadro empeore.
El dolor no siempre es curable, pero hay muchas formas de tratarlo. El tratamiento depende de la causa y el tipo de dolor. Hay tratamientos que usan medicamentos, como los
analgésicos. También hay
tratamientos sin medicamentos, como la
acupuntura, la fisioterapia y, en ciertos casos muy puntuales, la cirugía.
Fuentes consultadas: Instituto Nacional de Trastornos Neurológicos y Accidentes Cerebrovasculares de Estados Unidos (NIH), MedlinePlus, FDA.