Una de las primeras estrategias que recomiendan los expertos para recuperar el sueño en medio de la noche es…
hacer algo aburrido. Nada como una actividad monótona y libre de diversión para empezar a bostezar. La acción que se elija depende de cada persona, porque lo que es aburrido para algunas no lo es para otras.
Además, estudios han demostrado que las siguientes estrategias pueden ayudar a volver a conciliar el sueño en medio de la noche:
Mantener las luces apagadas. Al despertarse en medio de la noche es importante no prender la luz. La luz de una lámpara o la brillante de la pantalla de un celular pueden interferir con la
producción de melatonina, que ayuda a
regular los ciclos del sueño.
Levantarse de la cama y relajarse. Si no se puede volver a conciliar el sueño en unos 15 minutos, es mejor alejarse de la cama por un rato. Esto calma la ansiedad por tratar de dormirse de nuevo, pensando, por ejemplo, en que tenemos una cita en unas… cinco horas. La ansiedad por tratar de forzar el sueño logra lo contrario,
indican estudios. Sentarse en el sofá, realizar algunos ejercicios de respiración o escuchar algo de música relajante puede ayudar a regresar a la cama con otra actitud.
Usar aplicaciones de sueño. Contienen historias, música y sonidos asociados al buen dormir. Pueden ayudar a dormirse más rápido. La Fundación del Sueño
recomienda algunas que se pueden bajar en el celular. Hay gratuitas y buenas.
Continuar con la rutina habitual al día siguiente. Aunque probablemente la persona se sienta un poco más cansada en la jornada posterior al mal sueño, es conveniente
no modificar la rutina: no tomar siestas, planear dormir más temprano, o tomar infusiones con más cafeína.
Por fuera de estos episodios nocturnos que pueden ser muy molestos y alterar la vida diaria, mantener una buena higiene del sueño es un paso importante para prevenirlos.
Entre las recomendaciones están:
Acostarse y levantarse a la misma hora todos los días.
Mantener el dormitorio tranquilo, relajante y a una temperatura fresca.
Apagar los dispositivos electrónicos al menos 30 minutos antes de acostarse.
Evitar las comidas aundantes y el alcohol antes de acostarse.
Evitar la cafeína por la tarde o por la noche.
Hacer ejercicio con regularidad y mantener una dieta saludable.
Fuentes consultadas: Fundación del Sueño, Biblioteca Nacional de Medicina de EE.UU., Academia Americana de Medicina del Sueño, Johns Hopkins Medicine.