La bronquitis se presenta cuando el tejido de los bronquios, las vías que llevan el aire hacia los pulmones, se inflaman. Puede ser aguda, de corta duración, o crónica, cuando persiste o se vuelve recurrente.

Generalmente, la bronquitis se presenta como secuela de otra infección viral,  como el resfriado o la gripe. Primero afecta las vías superior, la nariz, la garganta, y  luego se propaga a las vías inferiores.

Los síntomas que suele presentar la bronquitis son:

La tos seca luego que el virus de la bronquitis se ha ido puede durar hasta cuatro semanas.

Se debe ir al médico si hay síntomas de bronquitis. El profesional de salud auscultará los pulmones para ver si los ruidos respiratorios son anormales.

En la mayoría de los casos, la bronquitis se alivia por sí sola hasta que el virus desaparece del cuerpo. Hay formas de aliviar las molestias que acusa, entre ellas:

Otros consejos para prevenir esta afección respiratoria:

Excepto por la tos seca, los síntomas seguramente desaparecerán en unos siete a 10 días.

Si no ocurre, o se mantiene fiebre alta, o se tose sangre, hay que ir al médico de inmediato.