Aunque este coronavirus es nuevo para la ciencia y para el mundo, hay mucha información previa sobre otros virus que son primos hermanos de COVID‑19 y cómo combatirlos.
La principal forma de contagio del nuevo coronavirus es de persona a persona, en especial al toser o estornudar. También se está investigando la posibilidad de contagio a través de tubos de calefacción y por contacto con heces infectadas.
Pero los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) también dicen que es posible que una persona se infecte al tocar una superficie en donde esté el virus y llevarse luego la mano a la boca.
La secuencia sería la siguiente. Una persona con coronavirus tose y se tapa la boca con la mano (no con el brazo como es la indicación de salud pública); luego toca, por ejemplo, una mesa. Luego, otra persona toca la misma superficie y se lleva la mano a los labios. El virus ya pasó de un ser humano a otro.
Ahora bien, ¿cuánto tiempo puede estar activo el virus en la superficie de esa mesa?
El análisis de múltiples estudios previos a este brote —que se realizaron para analizar el Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SARS) y el Síndrome Respiratorio de Medio Oriente (MERS)— llegó a la conclusión que los coronavirus pueden permanecer infecciosos en superficies inanimadas por hasta nueve días, a temperatura ambiente.
Pero hay dos cosas que lo aniquilan: las temperaturas más altas y la limpieza. Los desinfectantes comunes pueden destruir su poder infeccioso.
Aunque todavía hay mucho por saber sobre COVID‑19, no está de más poner en marcha una de las medidas domésticas más eficaces para prevenir el contagio de virus y otros gérmenes: mantener la casa limpia, y desinfectar a diario las superficies más usadas, por ejemplo la mesada que se usa para cocinar.